Qué ha pasado con los divorcios durante el Coronavirus. Esta es la pregunta que se realizan muchos sociólogos, psicólogos, abogados y también gente de toda índole en sus conversaciones cotidianas:

  • ¿Han aumentado los divorcios?
  • ¿El confinamiento ha sido un acelerador que se ha llevado por delante a muchas parejas?
  • ¿Qué impacto ha tenido en el mayor o menor cumplimiento de las medidas acordadas tras un divorcio?

Y tantas otras preguntas similares que podríamos anotar ¿verdad? Vale la pena recalcar que a día de hoy y con la perspectiva que nos da el transcurso de los meses, podemos enjuiciar la cuestión con más eficacia porque conocemos más capítulos de esta historia sobrevenida que ninguno de nosotros esperaba.

Una vida que se ha complicado

Como axioma de partida —si es que puede haber un axioma para cuestiones de familia— coincidiremos en que es más fácil hacer funcionar una pareja cuando todo va rodado y bien que cuando aparecen los problemas, aumentan las tensiones; vienen los reproches o simplemente nos damos la pausa para analizar todo muy bien.

Para muchas familias el coronavirus ha significado escenarios realmente difíciles de sobrellevar y gestionar con éxito. Entre ellos podríamos subrayar:

  • Confinamiento en el hogar
  • Pérdida del empleo
  • Enfermedad
  • Anulación de la vida social
  • Falta de competencias digitales que ayudaron a conectar la vida durante el encierro

La suma de estos factores puede desembocar en un aumento del estrés, insatisfacción general con la vida e incluso los médicos hablan de un aumento en los cuadros de depresión.

De igual forma también se ha producido un aumento de los divorcios.

Divorcios durante el Coronavirus

Todos los estudios gremiales alrededor de la relación entre divorcio y Coronavirus coinciden en señalar la pandemia no como una causa estricta en sí misma, pero sí como un precipitante.

Todos los estudios gremiales alrededor de la relación entre divorcio y Coronavirus coinciden en señalar la pandemia no como una causa estricta en sí misma, pero sí como un precipitante. Share on X

Nos hacemos entender: una pareja que funcionará perfectamente bien a primeros de marzo de 2020, atravesó el durísimo confinamiento con las mismas dificultades que cualquiera. Una pareja que viniera emitiendo señales de agotamiento o falta de sintonía, tenía altas probabilidades de salir terminada de ese confinamiento.

El confinamiento no es la causa directa del divorcio, pero sí ha actuado como precipitante de la decisión de poner fin a la relación, en los casos en que esta venía dando signos de agotamiento

Las causas habría que buscarlas en ese agotamiento o falta de sintonía que hemos mencionado y no en el propio confinamiento. El encierro en casa actúa aquí como un acelerador de la decisión de poner fin a esa pareja.

Medidas paternofiliales y confinamiento

Otro de acuerdo al que llegaron los análisis, es al incremento de los incumplimientos de las medidas acordadas tras un divorcio que se ha experimentado durante el confinamiento.

Los abogados especialistas en derecho de familia han tenido un intenso periodo de trabajo alrededor de la solicitud de modificaciones de medidas en todo lo que tiene que ver con custodia de los hijos; modificación de pensiones… que son aspectos que se han visto muy afectados por las medidas adoptadas para combatir la pandemia.

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